Por décadas, la región de Antofagasta ha sido destacada como el corazón minero y polo de desarrollo del norte de Chile. Sin duda, existen obras a lo largo del tiempo que priorizaron la construcción de infraestructura pensando en la actividad industrial, minera y portuaria de la zona, cuestión que se ha mantenido durante el gobierno del Presidente Gabriel Boric Font que además, se ha preocupado de dar un impulso significativo en materia de obras e infraestructura pública enfocada en las comunidades, sus necesidades e incluso, su seguridad.
Es por eso que entre 2022 y 2025, nuestro gobierno ha destinado cerca de 566 mil millones de pesos para obras públicas en la región de Antofagasta. Solo durante este año, esta inversión alcanzó los 186 mil millones de pesos, duplicando los recursos del año 2022, pero más allá de las cifras y los presupuestos, estos avances representan un paso prioritario hacia la construcción de una región más resiliente, segura y con una mejor calidad de vida para sus habitantes.
Esta inyección de recursos se ve reflejada principalmente en el mejoramiento del borde costero y de la infraestructura pesquera en el litoral regional; mejoramiento y ampliación de la red aeroportuaria, mejoramiento e implementación de sistemas de agua potable rural y especialmente, en las obras de control aluvional que otorgan seguridad a miles de personas ante los fenómenos climáticos extremos que podrían afectar nuestras ciudades y localidades costeras.
En nuestra región, avanzamos con hechos gracias a esta sólida inversión pública para responder a las necesidades de la comunidad. No son obras aisladas, sino que responden a una visión de desarrollo a largo plazo que incluye la seguridad hídrica, la prevención ante desastres naturales, la recuperación de espacios públicos y la modernización de la conectividad, sentando las bases para una región que mira hacia el futuro, invirtiendo tanto en el desarrollo industrial, minero y portuario, como en la calidad de vida y el bienestar de las comunidades.