Recinto público posee instrumental quirúrgico especializado y cirujanos maxilofaciales entrenados en Bélgica.
La cirugía ortognática es un procedimiento correctivo de los maxilares que requiere cortar, mover, modificar y realinear los huesos que involucran esta área del rostro. Hasta hace unos años esta intervención resultaba sumamente invasiva, con un post operatorio doloroso y largo.
El Hospital Regional de Antofagasta es uno de los pocos recintos médicos del país que realizan esta cirugía bajo una modalidad mínimamente invasiva, en donde se pasa de exponer casi todo el hueso del área intervenida a una incisión de 1,5 a 2 centímetros.
Fernando Germain, cirujano maxilofacial del Hospital Regional de Antofagasta, explicó que esta operación está recomendada para pacientes que tienen desarmonías dentomaxilares, en donde los maxilares no son concordantes uno con otro.
Esta malformación va más allá de un tema estético, resalta el cirujano maxilofacial Juan José Cortés, también profesional odontológico del HRA. Esta falta de armonía en general puede producir apnea del sueño, trastornos de la articulación temporomandibular, y otras patologías, que repercuten en enfermedades sistémicas, dolor, problemas para respirar y dificultades para comer.
Cortés detalla que esta técnica parte con una planificación en 3D, donde obtienen las direcciones de los movimientos óseos. Con esa información realizan la osteotomía o cortes en los huesos con los cuales buscan movilizar el hueso “y que sea más anterior o posterior, o simetrizar al paciente en relaciones maxilomandibulares”.
El Dr. Juan José Cortés detalló que “las cirugías ortognáticas se hacen en casi todos los hospitales del país que tienen cirujanos maxilofaciales, pero la mínimamente invasiva es relativamente nueva y nosotros la desarrollamos desde 2016”. “Podemos decir que fuimos pioneros en desarrollarla y que nuestros profesionales aprendieron la técnica gracias a una capacitación en Bélgica”, resaltó
Para realizar esta cirugía no basta con tener la capacitación, también es necesario contar un instrumental muy especializado. “Esta es una técnica instrumental dependiente. Tenemos la suerte de habernos equipado a través del apoyo de la dirección del hospital en su momento, y adquirir equipamiento nuevo para la cirugía”, destacó el profesional.
ÚLTIMO CASO
Fernando Germain, agregó que el instrumental que utiliza el HRA fue diseñado por el cirujano Belga, Gwen Swennen, y una empresa de instrumental llamada KLS Martin. También explicó que existen otro tipo de pacientes para este procedimiento, específicamente quienes han tenido un trauma y quedaron con secuelas.
Al enumerar otras ventajas de esta operación, el profesional destacó “un post operatorio mucho más tolerable para el paciente, con mucho menos edemas, la recuperación es más rápida y por lo tanto el paciente tiene menos días en el hospital y, generalmente, menos tiempo de licencia médica”.
La demanda por esta cirugía es alta, explicó Germain. El año pasado, detalló, fueron más de 50 los pacientes intervenidos.
La última intervención de este tipo fue 14 el de febrero y fue practicada en una mujer joven que tenía una oclusión clase 3 vertical con una mordida abierta. “Eso significa que por la forma de sus maxilares no podía cerrar la parte delantera de la boca. Además, presentaba una vía aérea estrecha y el maxilar comprimido”, explicó.
Ambos profesionales coincidieron en que esta intervención no sólo conlleva una mejor salud física para los pacientes, eliminando el dolor, permitiendo comer y hablar mejor, o terminando con la apnea del sueño, sino que también resulta ser un gran aporte a la salud mental de los pacientes al mejorar la percepción que tienen de si mismos.